Así nos fue en la ruta de Santa Marta

A las 07:30 horas de la mañana del día 9 de noviembre de 2014,  los 14 socios del Club BTT Sierra Grande de Hornachos, se reúnen en la parada para salir rumbo a esta aventura, que seguro que va a ser obligada en el calendario de rutas para años venideros. 

Todos con gran ilusión y algunos más nerviosos que otros. Íbamos representados en casi todas las categorías, sub-23, senior, cicloturista, master 30 y 40.

Llegamos a las 8:30 a Santa Marta con un frío que pela, y antes de bajar las bicis del carro, que se llenó, pasamos a retirar los dorsales donde ya había gran cantidad de participantes, por lo que hubo que hacer una pequeña cola.

Una vez bajadas las bicicletas, las dudas eran que ropa llevar, mucho o poco abrigo, como siempre el más friolero el Molina, que fue el único que llevaba el culote largo, bragas gordas para el cuello y chubasquero, luego confesó que paso calor.

Con los nervios de la salida, se nos olvido hasta hacernos una foto de todo el grupo. Ya bajo el arco de salida, se vislumbraba quien iba a por todas, colocándose en las primeras posiciones para enfilar hacia la primera rampa de la ruta.

Los de la ruta corta, Lorenzo, Germán, Víctor y Juan José, este último le ha gustado tanto la experiencia que se ha hecho socio al día siguiente de la ruta, toman la salida 5 minutos más tarde que los demás, pero aún así, algunos de ellos nos alcanzaron antes de llegar al primer desvío de ambas rutas (son unos máquinas).

Destacar de ambas rutas lo bonito de todo el trazado, con senderos en subidas y bajadas junto a riachuelos, vadear algún que otro arroyo en el cual nos llego el agua hasta los gemelos, subidas de infarto y algunas bajadas técnicas. La señalización en algunos puntos un poco escasa, motivo por el que el amigo Javier Meneses se despisto un par de veces, y que le impidió haber ganado unos puestos más en la general. Aún así, destacar que fue el único que consiguió subir al pódium, 3º en Senior, “¡¡¡Enhorabuena!!!”, (ya le hemos dicho que debe cambiarse a las 29), que con la máquina que tiene ahora no puede competir con los de arriba en igualdad de condiciones.

Por la dureza de la prueba, algunos de los que se inscribieron para hacer la ruta larga, al final les fallaron las fuerzas y tuvieron que optar por terminarla por el trazado de la corta, que también se las traía.
La llegada a la meta fue escalonada, donde se encontraban los socios del club que ya habían terminado animando y fotografiando al resto cuando iban llegando.

Lo peor de la ruta fue la caída del amigo Carlos Delgado a los 3 km de la salida, se dio un buen revolcón con algunos arañazos y rotura del culote, aunque esto no le impidió terminar la ruta larga y con un precioso tiempo. Aunque no fue el único que probó el suelo, el amigo Julián, una vez finalizada la misma y cuando íbamos a entrar en el salón para la comida, se despistó y tropezó con un pie de sombrilla, que le obligó a hacer un placaje a las baldosas del suelo, que ríete tú de los luchadores de sumo. El pobre se levantó, eso sí despacito, con una cara de decir “qué ha pasado”, enfilo para el salón y se metió un plato de macarrones y otro de filetes y se le paso rápido el susto.

Para algunos el final de la ruta fue un calvario “agua fría en las duchas”, por lo que unos optaron por no ducharse, otros si lo hicieron, pero más de uno se hizo el famoso lavado del gato (pies, partes nobles, sobaco y cara), el resto colonia y listo.

Una vez comiditos y recogido el premio el amigo Javier, cogimos carretera y manta para Hornachos, esperando que el próximo año seamos más socios del club los que nos animemos a participar en esta bonita ruta y experiencia, y que se vaya dando a conocer este joven club que seguro que dará mucho que hablar en el futuro.